Si quieres disfrutar en tu casa o en tu jardín observando aves y descubriendo cuales se acercan, ponles un cacharro con agua para que beban y se bañen, en una zona despejada del jardín, en un balcón, en una ventana (pero ten cuidado que esté firme, sin posibilidad de caer a la calle). Ahora, entrando el verano, es fundamental en las zonas semidesérticas en las que no hay cursos constantes de agua.
Es importante que el recipiente no sea muy profundo (basta con unos cuatro centímetros y que en su interior haya unas piedras para que puedan salir, beber desde ellas o trepar.
Renuévale el agua casi a diario, pues con el movimiento de las alas sacarán mucha fuera y además estará más fresca y evitarás larvas de mosquitos. El recipiente de vez en cuando debe lavarse bien, para evitar propagación de enfermedades. Las aves pueden trasmitir muchísimas enfermedades.
Si el agua está en un jardín, pon algún palo o coloca el cacharro cerca de un arbusto que le pueda servir de posadero antes de bajar. ¡Y por supuesto que esté en una zona despejada que no vaya un gato a jugarles una mala pasada! Que puedan divisarlo con tiempo si se acerca.
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Mirlo común
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| Verdecillo |
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Pareja de verdecillos
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| Picogordo |
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Grupo de currucas capirotadas, machos
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| Jilguero |
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Piquituerto y gorrión común
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| Verdecillo |
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| Piquituerto |
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| Verderón común |
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| Verderón común |
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| Petirrojo |
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Lavandera blanca
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Verderón común
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Curruca capirotada, hembra
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Curruca cascadeña
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| Tórtola turca |
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Papamoscas gris
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| Papamoscas gris |
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Colirrojo tizón
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Estornino negro
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| Gorrión común |
También han venido estorninos negro y pinto, mosquiteros, mitos, curucas cabecinegras, colirrojos real y tizón, carboneros, ruiseñor... y ¡ardillas!
Con suerte podrás disfrutar de cantidad de especies y cada una nueva que descubras te llenará de alegría.
